Viajando de un solo pique desde La Serena a Huentelauquén Sur. El viento es increible como te frena todo el tiempo. Se comió la empanada de rigor y entramos con destino a Mincha Sur. Ahi fue donde paramos a ver sus petroglifos, que se encuentran al lado de un camino interior. Solo son 2 pero valen la pena.
Seguimos al interior, pasando por Tunga Sur, y a la rápida nos llamó la atención su iglesia muy similar a la de Mincha Norte (declarada monumento nacional). Llegando al cruce a Salamanca, nos dirigimos a la costa para agarrar el camino a Las Cañas, que se conecta con Limáhuida, Caimanes y Tilama.
Desde Tilama a la costa se encuentra el embalse Culimo, y uno kilómetros mas arriba, subiendo por una quebrada llena de vegetación, se encuentran los petroglifos de Culimo. Dos máscaras y algo mas que no se alcanza a entender bien. Éstos, tal como los de Huentelauquén Sur, son bastante particulares.
Aqui alojamos una noche, y algo de la mañana siguiente…