Ancud. Despues de un dia de lluvia como recibimiento, sequé todo lo necesario para seguir a la mañana siguiente. Cielo despejado… todo parecía bien…
Salí para Castro, para ver los famosos palafitos. Ciudad grande, mucho mucho mucho tránsito, por lo que apenas cargué bencina salí de ahi.
Ahora con destino a Cucao y su parque nacional. El camino lleno de vegetación «jurásica», con el lago Huillinco al fondo.
Alojando en el mismo parque, me tomé la libertad de recorrer sus senderos antes de acostarme. Bastante tranquilo. Buena cafetería y todo en orden.
Tuve miedo de que lloviera, pero afortunadamente el sol estuvo ahi asomándose de vez en cuando. Con esto terminamos el dia.
Aqui la galeria:
Que lindo el sur…